El ultimo cigarrillo de la noche, junto con el último chupito de tequila con mis amigas, juntos con unos tacones de suela descastada y un vestido marrón, precioso. Nos volvemos todas, juntas de retirada, entramos al metro y te encuentro sentado con tu Ipod y a tu rollo como siempre. Y me acerco, me siento a tu lado y te agarro de la mano, te veo los ojos sin el brillo que los caracterizan, te veo los ojos rojos, demuestran que no es tu mejor día, y te pregunto, te limitas a contestarme que no te pasa nada, y me acerco a ti, te doy un beso, y te susurro que yo estaré hay siempre, que puedes llamarme a la hora que sea, que me tendrás a tu lado siempre que quieras, que sustituiré cualquier plan que tenga, por ti, solo con una condición. Que tu tampoco me faltes..